By Ishmael Behrhorst
Life can look a little different when you speak two languages, especially when you and your siblings are the only ones who speak English fluently in your household. That was my case. There were plenty of grown-up moments I experienced growing up, some embarrassing to admit. Like the time I had to request a payment extension on behalf of my parents because there were no Spanish speakers available on the phone. Or when my brother and I would take turns translating simple conversations at the local grocery store or shopping center. Moments like these remind me that my childhood looked a little different than some of my friends. I remember friends worried about their next family vacation or their next birthday while I had that payment extension in the back of my mind. Don’t get me wrong, I too had childlike concerns but there was an added layer that I could not remove myself from.
"Often, children growing up in these environments find themselves in a predicament where they must serve as translators for their non-English speaking parents or guardians."
These concerns are real and prevalent among many households where English is not the primary language. Often, children growing up in these environments find themselves in a predicament where they must serve as translators for their non-English speaking parents or guardians. These scenarios are more common than we may think.
Now imagine adding a new layer to the mix. A child in foster care who is removed from everything they find familiar and is concerned not only for their own well-being but also possibly whether their parents or guardians can understand what is happening. We see parentification of children—a role reversal in which a child ends up acting as parent to their own parent or sibling—happen often in child welfare cases. This can be even more exaggerated when we have language barriers that only a child can cross.
“In most of my cases, the parents or the placements are primarily Spanish speakers who need support to maneuver and understand a complex legal system.”
Senior Child Advocacy Specialist Florencia Grauer has gained a lot of experience and perspective in her 5 years at CASA as one of our Spanish-speaking staff members. She knows that bilingual volunteers bring a lot of value to the cases she’s worked on. “In most of my cases, the parents or the placements are primarily Spanish speakers who need support to maneuver and understand a complex legal system,” said Florencia. CASA volunteers not only interact with the children they’re appointed to, but also with all parties involved in a case, especially their parents and relatives, in order to advocate for the child’s best interest. When it is safe and in a child’s best interest, CASA aims to help heal and reunite families, and that often means working actively with their parents and relatives to support the process.
Often, cases that need bilingual support will involve extended family members who are not fluent in English. Florencia explained that these family members “felt less scared about what they were going through because the CASA volunteer could properly explain what was happening and the possible outcomes.” With multiple legal parties involved, a non-native speaker may feel intimidated to reach out to attorneys or a CPS caseworker who may not understand them. A bilingual CASA volunteer is often someone they can connect with and the person they may call first. For an adult whose first language is not English, a bilingual CASA volunteer can be one of the only sources for understanding a complex legal system, which may ultimately help them navigate it to heal and reunify their family (or support their relatives).
"A bilingual CASA volunteer can be an ally for a child who has these underlying concerns."
For the child who has been removed from a situation where they were the primary translator, having a bilingual CASA volunteer may help ease their additional fears about whether or not their parent fully understands what is happening. A bilingual CASA volunteer can be an ally for a child who has these underlying concerns.
CASA of Travis County hopes to recruit more bilingual volunteers* to help support families with these unique language barriers. By eliminating this stressor, CASA can help close the gap on anything that may have been lost in translation for parents and relatives who otherwise would have a strong chance at reunification.
Learn more about how you can be a powerful voice for a child in foster care on our Volunteer page.
If you’re not bilingual, please know how necessary you are as well. While we do have a high need for bilingual volunteers, there were 900 children in Travis County who needed a CASA volunteer last year. You could be their powerful voice.
*While we’re recruiting more volunteers who speak Spanish, it is vital that CASA volunteers be able to speak and write in English to work within the court system needs.
Perdido sin traducción
Por Ishmael Behrhorst
La vida puede verse un poco diferente cuando hablas dos idiomas, especialmente cuando tú y tus hermanos son los únicos que hablan inglés con fluidez en tu hogar. Ese fue mi caso. Hubieron muchos momentos en mi infancia donde tuve que crecer rápido, algunos momentos que hasta hoy mismo dan vergüenza de admitir. Como el momento en que tuve que solicitar una extensión de pago en nombre de mis padres porque no habían hispanohablantes disponibles por teléfono. O cuando mi hermano y yo nos turnamos para traducir conversaciones simples en la tienda o en un centro comercial. Momentos como estos me recuerdan que mi infancia se veía un poco diferente a la de algunos de mis amigos. Recuerdo escuchar a algunos amigos que se preocupaban por sus siguientes vacaciones familiares o su próximo cumpleaños mientras yo tenía esa extensión de pago en el fondo de mi mente. No me malinterpreten, yo también tenía preocupaciones infantiles, pero había una capa adicional de la que no podía eliminarme.
"A menudo, los niños que crecen en estos entornos se encuentran en una situación difícil donde deben servir como traductores para sus padres o guardianes que no hablan inglés."
Estas preocupaciones son reales y prevalecen en muchos hogares donde el inglés no es el idioma principal. A menudo, los niños que crecen en estos entornos se encuentran en una situación difícil donde deben servir como traductores para sus padres o guardianes que no hablan inglés. Estos escenarios son más comunes de lo que podemos pensar.
Ahora imagine agregar una nueva capa a la mezcla. Un niño bajo el cuidado del estado que se retira de todo lo que le resulta familiar y se preocupa no solo por su propio bienestar, sino también posiblemente si sus padres o guardianes pueden entender lo que está sucediendo. Vemos que la parentificación de los niños - una inversión de roles en la que un niño termina actuando como padre de su propio padre o hermano - ocurre con frecuencia en los casos de bienestar infantil. Esto puede ser aún más exagerado cuando tenemos barreras de idioma que solo un niño puede cruzar.
"En la mayoría de mis casos, los padres o guardianes son principalmente hispanohablantes que necesitan apoyo para maniobrar y comprender un sistema legal complejo."
Florencia Grauer, Especialista Principal en Defensa de la Infancia, ha adquirido mucha experiencia y perspectiva en sus 5 años en CASA como una de las integrantes de nuestro personal que habla español. Ella sabe que los voluntarios bilingües aportan mucho valor a los casos en los que ha trabajado. "En la mayoría de mis casos, los padres o guardianes son principalmente hispanohablantes que necesitan apoyo para maniobrar y comprender un sistema legal complejo", dijo Florencia. Los voluntarios de CASA no solo interactúan con los niños en un caso, sino también con todos los partidos involucrados, especialmente sus padres y familiares, para abogar por el mejor interés del niño. Cuando es seguro y en el mejor interés de un niño, CASA tiene como objetivo ayudar a sanar y reunir a las familias, y eso significa trabajar activamente con sus padres y familiares para apoyar el proceso.
Con frecuencia, los casos que necesitan apoyo bilingüe involucrarán a miembros de la familia extendida que no dominan el inglés. Florencia explicó que estos miembros de la familia "se sentían menos asustados por lo que estaban pasando porque el voluntario de CASA podía explicar adecuadamente lo que estaba sucediendo y los posibles resultados". Debido a la cantidad de partidos legales involucrados, una persona que no domina el inglés puede sentirse intimidado cuando se tiene que comunicar con un abogado o representante estatal. Un voluntario bilingüe de CASA le puede servir como beneficio a esta persona y ayudarle a comunicarse con todos los partidos legales. Para un adulto cuyo primer idioma no es el inglés, un voluntario bilingüe de CASA puede ser una de las únicas fuentes para comprender un sistema legal complejo, que en última instancia puede ayudarlos a sanar y reunificar a su familia (o apoyar a sus familiares).
"Un voluntario bilingüe de CASA puede ser un aliado para un niño que tiene estas preocupaciones."
Para el niño que ha sido retirado de una situación en la que fue el traductor principal, el tener un voluntario bilingüe de CASA puede ayudar a aliviar sus temores adicionales sobre si sus padres entienden o no lo que está sucediendo. Un voluntario bilingüe de CASA puede ser un aliado para un niño que tiene estas preocupaciones.
CASA del Condado de Travis espera reclutar más voluntarios bilingües * para ayudar a las familias con estas barreras lingüísticas. Al eliminar este factor estresante, CASA puede ayudar a cerrar la brecha mediante la traducción para padres y familiares que de otra no entenderían el proceso para reunir a una familia.
Obtenga más información sobre cómo puede ser una voz poderosa para un niño bajo el cuidado del estado en nuestra página de Voluntarios.
* Mientras estamos reclutando más voluntarios que hablen español, es vital que los voluntarios de CASA puedan hablar y escribir en inglés para trabajar dentro de las necesidades del sistema judicial.
2019 Culture & Diversity September